Aunque el Consejero de Sanidad, Rafael Bengoa, asegure que con este proyecto de cierre de Santiago como Hospital de agudos se generarán unos 300 empleos, los y las trabajadoras del centro no comparten la misma opinión al respecto.
Hay que tener en cuenta dos cuestiones.
La primera es que el número de camas con el macroproyecto diseñado por Osakidetza no sufre apenas ninguna variación, es decir, actualmente son alrededor de 760 camas las que existen entre los dos Hospitales, Txagorritxu y Santiago. Con el nuevo proyecto serían un total de 730 camas, mas otras 120 camas para crónicos, lo cual hace un total de 850 camas, más o menos. pero teniendo en cuenta que la intención de Osakidetza es la de reducir el número de camas en el Hospital de Leza (según palabras del Directos de Osakidetza), el aumento de camas es prácticamente nulo, es más, sale negativo. A todo esto hay que añadir el peligro evidente de cierre definitivo del Hospital de Leza.
La segunda cuestión es que después de analizar todos estos datos, más los que aportaba en un articulo de prensa del día 1 de abril, concretamente en El Correo, el Consejero de Economía y Hacienda, Carlos Aguirre, muestran claramente las verdaderas intenciones de ahorrarse bastantes puestos de trabajo a costa de la calidad asistencial, y sino aquí estan sus palabras:
"«se aplicarán medidas de racionalización del gasto, como eliminación de vacantes de larga duración presupuestadas y sin justificación, reducción de personal eventual, reducción de personal laboral temporal y reasignaciones de plantilla». También anunció que se aplicará una «tasa de reposición por jubilaciones», lo que significa que tan sólo se cubrirán con nuevas contrataciones una parte de las que se produzcan."
MAS CLARO AGUA
No hay comentarios:
Publicar un comentario